domingo, 15 de noviembre de 2009

dolor de cabeza


en ocasiones la ves venir y sientes como se instala progresivamente hasta paralizarte por completo. otras veces despiertas con una sensación muy desagradable. un hierro en la cabeza que hizo de tu noche una pesadilla y que augura un día complicado. a veces una pastilla (bendita sea), la inmovilidad, el silencio y la oscuridad más completa te ayudan. y en (pocas) horas notas como el dolor se va diluyendo, como el mínimo movimiento no es un latigazo que incrementa su intensidad.

y luego viene lo mejor, cuando ves que sales del tunel y que poco a poco vuelves a ser tú. ya es imparable. en ese momento: la inminencia de la luz, del no dolor, experimentas una sensación que si no es intensa (y exclusiva) felicidad se le parece mucho. como cuando va a amanecer pero todavía no lo ha hecho.

esta fue la primera canción que escuché ayer, cuando volvía a la normalidad...la tengo asociada a ese momento.

[mika:rain ]
http://www.dolordecabeza.net/

1 comentario:

María dijo...

Qué horrible cuando a penas puedes ni moverte por el dolor, hasta la luz duele...menos mal que sabemos que no es infinito y que, en algún momento, se marchará.