gracias a él, se rehabilitó. dejó sus adicciones poco a poco, todas: de la más turbia a la más social. abandonó su precario trabajo. estudió algo que le gustaba y, además, daba dinero. encontró trabajo. empezaba a irles bien. los planes ya eran comunes, siempre. no hacía falta hablarlo. los 'grandes proyectos' eran sólo cuestión de tiempo: dejar barcelona y ponerse. y le dejó. sin titubeos, sin previo aviso, sin hablarlo, sin remordimientos. dejándole a oscuras. perdido. pero siempre hay donde agarrarse.
hay muchas formas de ingratitud: la de la pareja, la de los amigos la del compañero de trabajo que no es tal...afortunadamente, los ingratos son los menos.
[piratas: esta es tu vida.]
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